Considerado
este encuentro por la afición como el derby
por antonomasia, los seguidores del Sucina se desplazaron en masa arropando al
equipo hasta la localidad vecina, en torno a unas 100 personas animaron al
equipo bajo el estandarte del Frente
Rojinegro.
El partido
trascurrió con la misma tónica de costumbre, con la
A.D. Sucina volcada sobre la portería
rival, mucha intensidad y balones rápidos a la espalda de la defensa. Al
descanso el luminoso lucía un abultado 0-3 merced a los goles de Mariano
Giménez que ejecutó un libre directo con maestría por la escuadra, el segundo
tanto fue en propia puerta tras un mal despeje a la salida de un corner y el
tercero lo anotó Brahim que recupera las sensaciones tras tres partidos de
sequía goleadora. Las impresiones al descanso eran inmejorables dado que el
partido estaba aparentemente resuelto, no obstante, durante el desarrollo de la
segunda mitad en un fallo de entrega del meta Rachid, un contrario intercepto
el pase que solo tuvo que empujar el balón dentro de la portería. Con 1-3 el
conjunto local se vino arriba, y no tardando mucho anotaron el 2-3 tras un
riguroso penalti que el colegiado señaló por mano dentro del área. Ante esta
situación el equipo quedo un poco descolocado, pero la afición fue en estos
momentos de adversidad cuando mas empujó al equipo. Con el Santiago de la Ribera volcado al ataque en
busca del 3-3, el conjunto sucinero fue muy incisivo al contragolpe que
sentenció el partido con dos goles más hasta el 2-5 definitivo, gracias a los
tantos de Brahim y José Manuel López, sendos goles de vaselina sorteando al
portero por arriba.
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